POR VINICIO LOPEZ FELIZ
.
Regresando de Santo Domingo el lunes pasado tuve el privilegio de compartir asiento en Caribe Tours con el distinguido arquitecto Osorio, una de las personas que se ha dedicado a luchar por el mejor ordenamiento urbano de la ciudad de Barahona. Nos conocimos por primera vez cuando desempeñábamos una de las tres gestiones que desarrollamos al frente de la dirección del Hospital Regional Jaime Mota. En esa ocasión nos visitó el arquitecto Ozorio acompañando a una misión japonesa que operaba en coordinación con el honorable ayuntamiento municipal de Barahona en procura de mejorar la organización urbanística.
Entre tantas ideas e inquietudes que analizamos para paliar el preocupante desempleo de la juventud barahonera, me explicaba todos los proyectos que tienen como propuesta un grupo de prestigiosos munícipes que trabaja en las propuestas que pueden ayudar a saldar la gran deuda social acumulada del Estado Dominicano con una región llena de riquezas inexplotadas por falta de inversión estatal, y por falta de incentivos a las iniciativas privadas.
Cifra el arquitecto Osorio sus esperanzas, así como el grupo de ciudadanos comprometidos con estas iniciativas, en que el nuevo gobierno de Danilo Medina de manera inicial aperture un programa de construcciones que facilite el empleo y la dinamización de la economía local. Uno de estos proyectos viables consiste en la construcción del Centro Cívico Gubernamental de Barahona, donde se instalarían todas las oficinas gubernamentales con sedes en nuestra provincia. El lugar elegido es el edificio conocido como El Huacalito, donde operan algunas oficinas gubernamentales.
Para ello se dispone de terrenos estatales suficientes, y analizamos que bastaría con el compromiso de que todas nuestras sedes gubernamentales que funcionan en locales alquilados asuman la responsabilidad de aportar los recursos necesarios en función de la cantidad de metros cuadrados a utilizar. El gobierno central descontaría de las partidas presupuestarias de cada institución los recursos comprometidos para la financiación de este proyecto y haría los aportes correspondientes de manera oportuna para su ejecución. Así lograríamos mejor coordinación interinstitucional y facilitar los servicios al ciudadano, a la vez que mejoramos el empleo. Ese es un primer paso en lo que se desarrollan los grandes proyectos postergados. El arquitecto Osorio nos autorizó a hacer público este proyecto.