Para los entusiastas del GTI; ¿estarían dispuestos a ceder el trono a este nuevo cohetito? ó ¿será que tiene que ganárselo a pulso? Nosotros pensamos que el espiritu GTI puede regresar con el Polo.
Ultimamente hemos visto y escuchado bastante sobre el GTI (sí, así se dice); si escuchan a alguien decir “la GTI” ¡están autorizados a darle un buén zape!
El caso es que a pesar de que las últimas generaciones y ediciones de este modelo son muy deseables, hay que reconocer que sí se ha perdido un poco de la escencia de aquel ejemplar que se creó casi, casi bajo el agua en Volkswagen con idea de ser sobre todas las cosas: ligero, potente y muy radical.
Hoy en día ya existe una opción más en el peleadísimo terreno GTI; se trata del hermano menor del Golf y se llama Polo GTI que para muchos es el nuevo verdadero GTI, ya que con el motor TSi de 184 hp, un bastidor reforzado y acoplado a la súper probada DSG de siete cambios, rescata las verdaderas cualidades de su hermano.
Los más calvados en la onda VAG seguramente le harán el feo por la onda de la caja electrónica (sabemos que preferirían manual, la tecnología se impone) pero la verdad es que nosotros ya queremos ponerle las manotas encima, porque si analizamos la ligereza del Polo, el diferencial electronico y el ESP que podemos usar como se nos antoje, tenemos un conjunto muy deseable y es que no dudamos que gracias a esa ligereza, el nuevo Polo nos exija en las curvas con las intensiones de un buén derrapón; algo que lejos de espantarnos, estaría bastante suave.
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